Un año más los niños del cole
entraron a la capilla para que celebrar el Miércoles de Ceniza. Es un momento
de reflexión donde el diácono les dijo que es tiempo de cambiar el corazón, de
dejar a tras las acciones malas que hemos hecho.
Los niños supieron decir qué cosas
tienen que cambiar para ser buenos: no pelearse, amar, rezar, pedir perdón…
Son momentos donde, tanto los mayores
como los pequeños, hacen un alto en el camino para repasar el comportamiento
que están teniendo y madurar sobre sus acciones.
Con el Miércoles de Ceniza comenzamos
el camino hacia la Cuaresma donde cada semana haremos un aparada para detenernos
y trabajar en los valores de misericordia, ayuda, fe, solidaridad y amor.
En este viaje vamos juntos y Dios es
quien tira de nosotros. Es el que nos guía, nos da fuerza y nos muestra el
camino a seguir.
¿TE APUNTAS A ESTE VIAJE?
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